Enfermo sin perfil
Cualquier persona es candidato a ser un comedor compulsivo, desde hombres a mujeres, de cualquier edad y estrato social. Existen quienes se atiborran de comida diariamente, los que se dan atracones y no dejan de comer en todo el día, como también aquellos que sólo manifiestan esta conducta periódicamente.
Los recurrentes atracones que surgen con esta conducta, dan cabida a que estas personas compartan estos episodios con enfermos de bulimia. Son momentos que a veces ocurren a escondidas de otras personas, de tiempo corto pero donde se ingiere gran cantidad de alimentos, preferentemente híper calóricos. Generalmente son personas que han intentado adelgazar más de una vez y que sufren variaciones en su peso debido a la alternancia entre ayunos y empachos.
Luego de esta instancia, aparecen los sentimientos de depresión y repulsión hacia ellos mismos. Es por esto que sienten la necesidad de encontrarse a dieta constantemente y en estado de privación, de manera que en cuanto deseen abandonar el régimen, sientan la sensación de que deben comer en grandes cantidades para reparar las privaciones anteriores.
Adicción a la Comida: Plan de Cuatro Niveles
En la obra de Gloria Arenson “Una sustancia llamada comida”, podemos encontrar “Un plan a cuatro niveles”, que parte de la base de lograr hacernos conscientes de la adicción a la comida y desde ahí, plantearnos superar el problema.
1. Nivel físico: la conducta. Se recomienda llevar un diario donde se plasmen los “episodios de atracón”, para luego puntuarlos por su intensidad según una escala del uno al diez.
2. Nivel emocional: los sentimientos. Tomar cada una de las anotaciones y preguntarse qué hay en nuestras vidas que merezca una puntuación como la recientemente entregada al empacho.
3. Nivel cognitivo: los pensamientos y las creencias. Debido a que no se ha encontrado nada que merezca esta puntuación, debemos analizar qué pensamos sobre nosotros mismos después del atracón y la posible razón de por qué actuamos así.
4. Nivel transpersonal: la recuperación del poder. Se deben buscar las maneras para dejar de sentirse una víctima. Busque ayuda de un especialista si lo cree necesario.
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